miércoles, 18 de mayo de 2011

El idioma de los dioses nach


Si estoy solo tu me acojes eres mi fiel compañía,
me hablas sincera y me esperas cuando empieza el día.
Mi guía, mi faro de Alejandría, si me ves perdido
te miro y elimino la tristeza en un suspiro.

Das sentido a mi existencia, tú desobediencia,
tú, sola presencia merece mi reverencia,
tú me diste un don, fuiste mi espada,
siempre encerrada en tu prisión si la inspiración faltaba.

Desde la nada me abrazas, no prohibes ni amenazas
tan romántica y auténtica, tú nunca te disfrazas
como un hada y un verdugo firme escudo en la batalla,
tú, a quién acudo si otros fallan.

Me das retos, aventuras y responsabilidad,
me das éxito y dinero me quitas la intimidad,
me exiges crear, me haces temblar, soñar, me curas
me eliges para hablar si las calles están mudas.

Me desnudas con ternura y siento tu tacto y tu olor,
si te veo volar libre entre la voz de un cantautor
eres Ópera y Flamenco, eres todo lo que tengo y te amo,
mientras brotas entre las notas de un piano.

Y me desintegras pintando estas noches negras,
me alegras, me invades, me evades, alejas las tinieblas
y me resucitas siempre, nunca me mientes
eres el recipiente donde lágrimas se vierten.

Eres Tango y eres ritmo vives en do, re, mi, fa
impredecible compás cuando te vistes de Jazz,
llegas y me das ógixeno, mi único somnífero
si el mortífero estrés tensa mis músculos, discípulo

de tu inmensa maestría cuando no te conocía,
como podía vivir sin percibir tu melodía
fuiste mía y solo mía en mis horas de miseria,
compones la banda sonora de esta tragicomedia.
Y continúa..