miércoles, 14 de septiembre de 2011

Búscate a alguien que te abarque al abrazarte, y que lo haga con tal fuerza, que se te salgan las tripas por la boca. Búscate a alguien que te bese en los semáforos, y que después, quiera lanzarse contigo bajo las ruedas de un camión. Búscate a alguien que te cubra con una sábana cuando te quedes dormida, y que le tenga envidia al sueño por no dejarte ver quién eres cuando cierras los ojos. No busques que te inviten a copas, que te paseen en coche, que te hagan regalos  y que te digan cosas bonitas. Eso puede hacerlo cualquiera.